miércoles, 17 de marzo de 2010

En BaRrO


Una de las actividades más representativas de la vida de los pueblos precolombinos fue la alfarería. En ollas, jarras y vasijas se guardaba el agua, el maíz y la sal; se fermentaba la chicha y se preparaban los alimentos.

Desde estos tiempos, las vasijas de arcilla y barro han adquirido no solamente un carácter útil en la vida de las sociedades que las elaboraban sino un cierto valor mágico, ya que la cerámica era y es considerada la unión de los cuatro elementos del universo: agua, aire, barro y fuego.

El municipio colombiano especializado en cerámica artesanal es Ráquira, un pueblo del departamento de Boyacá.
Los conquistadores españoles llegaron a Ráquira, que en lengua chibcha significaba Ciudad de las ollas, en el año 1537 y viendo la diversidad de utensilios elaborados en cerámica y una extraordinaria habilidad manual de los indígenas, le dieron el nombre de Pueblo de olleros.

Ráquira es, hoy en día, un pueblo cuyo cada metro cuadrado está cubierto de cerámica elaborada de forma tradicional por las manos de expertos que de los bojotes de arcilla moldean ollas, jarrones, marranitos y todo tipo de utensilios.

La GuAdA



Guadua

Las tacuaras (Guadua spp.) son un género de plantas de la familia de las poáceas.

En el año de 1806 fue descrita por Humboldt y Bonpland quienes vieron esta planta en Colombia y la llamaron Bambusa guadua, luego en 1822 fue clasificada por Kunt como Guadua angustifolia. Se considera como una de las plantas nativas más representativas de los bosques andinos.

Este recurso se utilizaba ya desde épocas remotas por parte de los primitivos pobladores de los Andes, y actualmente sigue siendo usada, especialmente en la región centro-occidental de Colombia.

No se sabe a ciencia cierta el origen de la palabra guadua, aunque ciertos especialistas creen que podría ser venezolano. Estas versiones emergen de las variantes “Guadúas”, “Guaja” con las cuales se conoce esta planta en ese país.



Uso
Su uso es tan antiguo que, según el libro ‘Nuevas técnicas de construcción en Bambú’ (1978), en Ecuador se han encontrado improntas de bambú en construcciones que se estima tienen 9.500 años de antigüedad.

Puentes colgantes y atirantados de impresionante precisión de ingeniería, poderosas embarcaciones así como flautas, quenas y marimbas, fueron realizados por los Incas con este recurso durante la época de preconquista, y después de ella durante la colonia, la especie fue la encargada de proteger indios y hasta pequeños pueblos del asedio de los españoles escondiéndolos tras sus espesuras.

Colombia, Ecuador y Panamá son los países en América que registran mayor tradición de uso, de hecho en estas zonas existieron las mayores extensiones de la especie en el continente.

En Colombia la guadua ha sido sometida a grandes presiones deforestadoras; de extensas áreas existentes ha pasado a pequeñas manchas boscosas ubicadas en las orillas de los ríos y en los bosques húmedos de las laderas de montaña, especialmente en los departamentos de Quindío, Risaralda, Caldas, Tolima, Valle del Cauca, Cundinamarca y Santander.

LaMpArAs En GuAdUa

La guadua es el elemento más importante de la cultura cafetera colombiana, es el paisaje, el acueducto, el material de construcción, el puente sobre la quebrada, la cerca, el trincho, el gallinero, la escalera, el juego, la silla, la cama, el mueble, el florero, el artefacto que a través de sus múltiples usos ha acompañado el entorno y la vida cotidiana del viejo caldas.




La guadua se caracteriza por una gran resistencia, durabilidad y fácil manejo, lo que llevó a denominarla el acero vegetal. Crece de manera muy rápida, alcanzando en cinco años la altura de treinta metros. En el clima adecuado, como , puede crecer hasta once centímetros al día y lograr su altura total en seis meses. Es un recurso sostenible y renovable, que se auto multiplica vegetativamente, sin necesidad de semillas para reproducirse.

La guadua es un tipo de bambú, muy característico en el paisaje del Triángulo del Café y de la región andina.
La guadua, posee, además, características ecológicas, siendo una fuente importante de agua, ayudando, al mismo tiempo, en la regulación de los caudales, en la captura de CO2 y en la purificación del ambiente.

Por otro lado, es un material supremamente liviano y flexible, lo que permite utilizarlo en el campo industrial, para levantar construcciones sismorresistentes, muy originales a nivel de diseño y propias del paisaje colombiano.

ArTeSaNiAs En FiQuE



Las fibras vegetales, como el fique y la paja, siempre se han utilizado en la fabricación de objetos artesanales en Colombia. Adicionalmente, siendo materiales biodegradables y ecológicos, se han usado en la elaboración de empaques, costales para transportar el café, abonos, cuerdas, etc.

Por otro lado, la paja se refiere, en este caso, a la hoja de una palma. La paja debe ser pareja en su espesor para lograr un enrollado perfecto y armar la artesanía de tal forma que al manipularla y envolverla con el fique, no se desbarate. Los artesanos escogen las plantas de las partes más altas de la región que son las más largas y las menos ásperas.

ARTESANIAS EN COLOMBIA


Hoy en día, las artesanías de Colombia constituyen uno de los productos del mejor diseño e insuperable calidad que ofrece nuestro país. Las encontraremos en los almacenes de las capitales mundiales, tales como Milán y Nueva York, al igual que en las casas de los turistas chinos, franceses, canadienses, rusos y muchos muchos más que visitaron Colombia y se llevaron de recuerdo alguno de nuestros productos artesanales.

Por su inmensa riqueza artesanal Colombia resalta a nivel mundial. Los productos artesanales colombianos se caracterizan por una gran diferenciación regional, relacionada con la notable diversificación geográfica que va desde la Guajira hasta el Amazonas y desde Nariño y el Putumayo hasta la Orinoquía. En ellas, nuestros artesanos demuestran una enorme creatividad, imaginación, ingenio y talento que nos caracteriza.

Viaja hasta Colombia y descubre lo increíble de las piezas artesanales que propone nuestro país.
La base de los productos artesanales colombianos es una cantidad innumerable de productos naturales que ofrece esta tierra y que se encuentran al alcance de la mano: arcilla, bambú, cuero, fibras, fique, guadua, lana, madera, tagua, totumo, metales preciosos, etc.

La artesanía colombiana es la máxima representación de la idiosincrasia y una de sus mejores expresiones culturales. Hamacas, piezas de oro, filigranas en plata, cestería, tapicería, cerámica, accesorios en coco o semillas, bordados, mubles, esculturas en tagua, objetos de madera y artículos tejidos a mano constituyen una excelente vitrina de Colombia para el mundo.